Nunca nada es como queremos que sea o tal vez todo sea como nosotros pensamos que tiene que ser.
Cuando queremos algo lo queremos en el mismo momento que pensamos que necesitamos tenerlo, al día siguiente sin tenerlo renuncias y te dices que era un imposible. Hace mil años era imposible volar, actualmente vuelan millones de personas al día en grandes naves que recorren un océano en 8 horas. Con esto me quiero referir a que todo tiene su intención, no nos podemos quedar estacionados en el limbo pensando en el "que pasará"... si no caminar por el espinoso tallo de la rosa para poder llegar a sus bellos pétalos. Aveces hay rosas que nos dificultan más que otras, cuando esto suceda pásate a otra y así hazlo las veces que creas necesario. Cuando nos empeñamos por conseguir algo que vemos que no nos llevará a nada, pasa ante nosotros oportunidades que tal vez sean las que te hagan feliz. Nunca andes por un tallo retorcido llevando los ojos vendados, tal vez a tu izquierda o a tu derecha esté aquel camino "tallo" que te lleve a la felicidad"rosa"
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